La lesión más brutal de la historia de las MMA

Las MMA son un deporte de impacto. Nadie se sorprende al saber que cuando los peleadores entran a la jaula, salen absolutamente diferentes a cuando entraron. De ahí que no todas las semanas podamos disfrutar a nuestros atletas favoritos todas las semanas, como ocurre en el futbol, tenis, etc.

Pero a veces suceden casos donde el daño o las lesiones hacia un peleador de MMA supera cualquier expectativa, a tal punto que todos nos lamentamos. Porque asumámoslo, a nadie le gusta ver lesiones graves, independiente del deporte que sea.

El 16 de julio de 2016 ocurrió la lesión más grave de la historia de las MMA, a tal punto que uno de los peleadores debió retirarse del deporte por culpa del impacto.

Evangelista “Cyborg” Santos fue el protagonista de esta historia, donde sufrió una terrible fractura de cráneo durante su combate ante Michael “Venom” Page en Bellator 158, llevado a cabo en Londres el 16 de julio de 2016.

Una increíble imagen de la radiografía del cráneo de Santos fue compartida en Instagram por la ex esposa del peleador, la también peleadora brasileña Cris “Cyborg” Justino la cual sirvió como prueba de la espeluznante lesión.

«Aficionados, por favor hagan una oración por mi ex esposo “Cyborg” Santos. Muchos de ustedes vieron la pelea. Él sigue en el hospital en Londres y no saben cuando vaya a poder volar a casa. No ha sido operado y hay preocupación de que su cerebro pueda seguirse inflamando y causando más daño”.

“Se supone que Bellator MMA se hace responsable por todos los gastos médicos, sin embargo, “Cyborg” no va a poder trabajar durante algún tiempo. Por lo tanto, haremos una cuenta en GoFundMe para aquellos aficionados que quieran ayudar a su familia y a él durante estos tiempos difíciles”, fue lo que escribió la peleadora y leyenda de las MMA, Cris Cyborg.

Tras el combate y meses de recuperación Evangelista “Cyborg” Santos jamás pudo volver a las MMA, señalando en su despedida “Salgo de la jaula con la cabeza en alto. No tengo intenciones de regresar”.

En su carrera como luchador profesional, Evangelista “Cyborg” Santos, tuvo la oportunidad de pelear con Mauricio Roa, Melvin Manhoef y Nick Diaz y ahora sólo se dedica a entrenar a jóvenes promesas para ser grandes campeones de las MMA en las instalaciones de Chute Boxe Texas.

El salario de Cyborg se ha reducido considerablemente al pasar de luchador profesional en LFA y Bellator a ser profesor de MMA, pero admite que es feliz. El dinero no le da la felicidad y no es por lo que peleaba cuando era luchador. Su motivación a la hora de subir al octógono era la ganar y las ganas de superarse a así mismo.

“Tuve el privilegio de hacer 50 peleas y el dinero nunca fue mi mayor motivación para pelear. Siempre he luchado por el amor a la competencia, el desafío. Eso es lo que me motivó. Siempre he luchado por cualquier dinero, nunca he elegido a quién pelear o por cuánto”.

“Cuando tenía 15 años y le dije a la gente que lucharía en Japón y en los Estados Unidos, se rieron de mí, y eso me dio fuerzas para seguir y demostrar que están equivocados (…) Esto es lo que quiero enseñarles a las personas”.