miércoles, octubre 4, 2023
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La Maldición del “UFC International Fight Week”

Todos los años UFC celebra «El evento de la semana de la lucha» (International Fight Week) el cual se realiza a principio de julio para aprovechar los feriados del Día de la Independencia de los Estados Unidos, siendo uno de los focos promocionales más grandes de UFC.

Desde 2012, la organización le ha dado una gran importancia a la fecha intentando poner al menos dos disputas de cinturón, además de reconocidos nombres a la cartelera. Sin embargo, durante los últimos años, todos los esfuerzos puestos en la velada han sido estériles debido a lesiones, problemas con la balanza, dopaje y hasta pandemias, causando decepciones entre los fanáticos a pocas horas de iniciarse el evento.

El 2020, obviamente no hubo semana de la lucha debido a la pandemia del Coronavirus. Un sinfin de actividades con los fanáticos fueron cancelados y por primera vez en la historia no se realizó tampoco la inducción al salón de la fama de UFC.

Pero toda esta secuencia de hechos desafortunados comenzó en 2015. Con menos de dos semanas para el UFC 189, el entonces campeón de los pesos pluma, ​​José Aldo, sufrió una lesión en la costilla que le impidió proseguir con su planeada defensa de cinturón contra Conor McGregor y la super pelea debió cancelarse. Para la ocasión, UFC llamó de emergencia a Chad Mendes para sustituirlo y colocó un cinturón interino de la categoría en juego. McGregor venció a Mendes y enfrentó a Aldo en diciembre del mismo año.

Poster de UFC 189, evento que jamás tuvo a Jose Aldo en cartelera.

Al año siguiente, en 2016, la pelea principal para el emblemático UFC 200 sería la revancha entre Conor McGregor y Nate Díaz, por lo que se esperaba que fuera el evento con mayor ventas de PPV de la historia por lo que significaba el choque, pero poco menos de un mes, «The Notorious» se bajó de la pelea y anunció su retiro de las MMA.

Nate Díaz vs. Conor McGregor iba a ser el combate estelar del evento UFC 200, pero el combate se cayó.

El mismo 2016 en UFC 200, para salvar la cartelera se propuso Jon Jones vs Daniel Cormier por el cinturón de los pesos semicompletos; sin embargo, tres días antes del evento, la Agencia de Antidopaje de Estados Unidos (USADA, por sus siglas en inglés) notificó a la compañía dueña del octágono que Jones había fallado en un examen antidopaje realizado fuera de competición, y que el atleta sería suspendido preventivamente. Anderson Silva reemplazó a Jones, pero la lucha fue movida más abajo en la programación, y la disputa del título de peso gallo femenino entre Miesha Tate y Amanda Nunes fue promovida a la posición de estelar.

Daniel Cormier vs. Jon Jones sería el combate que salvaría el UFC 200, pero el doping dijo otra cosa.

En 2017, Se esperaba una pelea en el Campeonato de Peso Gallo de UFC entre el campeón Cody Garbrandt y el ex monarca TJ Dillashaw. Sin embargo, un mes antes Garbrandt se retiró debido a una lesión en la espalda y la pelea fue desechada. Ahí nació la posibilidad de que Amanda Nunes encabezara la cartelera del UFC 213 «International Week», donde defendería su cinturón de peso gallo femenino ante Valentina Shevchenko. Pero la maldición apareció una vez más y Amanda se retiró de la pelea el mismo día del evento, tras pasar una mala noche que la obligó a ser hospitalizada. Su equipo alegó que los síntomas pertenecían a una sinusitis crónica, por lo que la compañía decidió poner el enfrentamiento entre Robert Whittaker y Yoel Romero, por el cinturón interino de los pesos medios, como el combate estelar de la velada.

El mismo día del evento se cayó la pelea estelar, ya que Amanda Nunes sufrió Sinusitis.

Finalmente, en el UFC 226 del año 2019, Stipe Miocic, quien defendió su correa de campeón ante Daniel Cormier en la pelea principal del evento, pero el combate co-estelar de la jornada fue quien sufrió, ya que Max Holloway, campeón de los pesos plumas por aquel tiempo, fue retirado de manera abrupta de la cartelera a sólo dos días de llevarse a cabo el combate contra Brian Ortega. Holloway venía sufriendo algunas dolencias por culpa de una conmoción cerebral, la cual le provocó, incluso, un desmayo.

Max Holloway sufrió una contusión cerebral que le provocó un desmayo, por lo que fue retirado de la cartelera.

Finalmente, se colocó como pelea co-estelar al encuentre entre Derrick Lewis y Francis Ngannou, la cual resultó ser un fiasco de entrenamiento.

Simplemente… Una verdadera Maldición.

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