El 9 de abril del 2011 en San Diego, California, se vivió una de las peleas más emocionantes de la era moderna del MMA. Nick Díaz, por ese entonces campeón de Peso Welter de la compañía dueña del hexágono, defendió su correa ante Paul Daley, en un combate que a la postre terminó siendo un clásico.
Y es que fue demasiada emoción para un sólo round, si señores, la pelea duró un sólo round, pero tuvo de todo. En dos ocasiones Daley tuvo al límite del KO al mayor de los Díaz, pero el “Bad Boy” logró con tesón levantarse, reintegrarse a la pelea y mostrar su temido boxeo.
John McCarthy, árbitro del encuentro, estuvo genial, se mantuvo atento a cada golpe y no paró la pelea hasta el momento justo, instancia donde Díaz noqueó a su rival y retuvo su correa, justo en el límite de tiempo (4:57 del round 1).