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En 2016, Josh Barnett dio positivo por la sustancia prohibida ostarine (suplemento para quemar grasa y definir los músculos) en un examen realizado el 9 de diciembre, fuera del período de competición. Pero todo quedó en nada, ya que este viernes 23 de marzo, la USADA (Agencia Antidopaje de EEUU), informó que el atleta no será castigado y, por lo tanto, está habilitado para volver a las MMA.
El excampeón de peso pesado de UFC y su equipo jurídico lograron comprobar que la sustancia ilegal había aparecido en su examen a través de un suplemento contaminado.
«La sustancia apareció por medio de un suplemento contaminado, algo que no percató el atleta, aún cuando él siempre tuvo un especial cuidado en relación a los productos que consumía, por lo tanto, el juez determinó que sólo una reprimenda pública era apropiada», señaló el comunicado de prensa de la USADA.
La osterinE es una sustancia que no está aprobada por la FDA (Administración de Comidas y Remedios), y se vende de manera ilegal en los Estados Unidos como una suplemento que mejora el rendimiento. A pesar que no está disponible ni como un medicamento que se pueda prescribir, de igual manera se ha encontrado en algunos suplementos alimenticios del país norteamericano.
De esta manera, Barnett, que cayó en el dopaje en 2002 y 2009, puede volver a pelear si así lo quisiera, aunque no se sabe bien si es que tendrá un retorno a la jaula. Recordemos que la última vez que el excampeón de peso pesado de UFC tuvo acción fue en septiembre de 2016, cuando finalizó Andrei Arlovski en el tercer round, lo cual significó su victoria número 35 victorias en una carrera que sólo acumula ocho derrotas.